"el veintitres vuelve a ser mi numero de la suerte"

Camino a casa me puse a pensar en este largo (largísimo) metraje que cuenta la historia de dos puntos que convergen su existencia en algún momento de sus vidas.
Paralelamente el destino iba tejiendo nuevas experiencias que servirían mas adelante como aprendizaje interno individual respectivamente para cada punto, experiencias que servirían como atenuantes para posibles (mas probables que posibles) futuros acontecimientos.
Pensando en ello compré un par de plumones, una cartulina y pizza para llevar. Llegué a casa y me dispuse a entender y explicar una conclusión final para que entiendas el por qué de mis reacciones.
Preparé gráficos, esquemas y un power point que explican por qué debemos terminar todo esto, también preparé un grafico que demuestra el balance pasado y las potenciales dificultades que se vendrían en el futuro... Yo no quiero quedar como el idiota que siempre engañan, pero tampoco te mentiría con caretas de hombre astuto y calculador. Me conoces perfectamente y sabes como soy, solo quería asegurarme de estar haciendo lo correcto... Es curioso; un par de años viviendo, otros tantos de mentiras, la decepción, los traumas fantasmales, la aceptación y ahora nada.
Creo que así funciona, costó bastante pero creo que esta muy claro, ya no te amo. Y si te abraso con una sonrisa tranquila sin dolor, es porque quería compartirlo contigo. La vida me sirvió para aprender a vivir y esta etapa, la del seceso 'R', ya fué superada.
Te quiero muchísimo, pero la vida es demasiado corta como para perder tanto tiempo una vez mas.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Hoy, pensaba,
pensé
y uno pierde mucho tiempo y palabras en gente que no lo merecía
hay cosas que marcan tanto
pero ocupan demasiado espacio en nuestro cerebro, avanzar, superar etapas bla bla bla esa es la técnica que no debe perdurar durante tanto tiempo, está claro, la herida es profunda pero nunca eterna si uno deja de sacarse la costra
mal día espero que haya sido bueno para ti eso nada más
vine pasé y me fui como un fantasma (ojalá no se note)