Max Steel y las Navajas Post-Adolecentes.
Tuve la suerte de vivir la mutacion de pendex-indie a adolecente-mayor en el liceo Industrial Italia, uno de esos liceos q pertenecen a sociedades de viejitas de la alta alcurnia q aparte de juntarse a tomar té invierten acciones de Wall Street en iluminar con sabiduria al proletariado.
En el patio podia ver todo tipo de manifestaciones juveniles intentando llamar la atencion, deficit atencional seria poco, mas bien lo llamaría una especie de tratamiento contra la invisibilidad. Diego Tur era lo mas cercano (muy cercano) al chico popular del Liceo, todos lo respetaban, desde el mas insignificante meqetrefe de primer año hasta el mismisimo director general. A mi me daba lo mismo, mas de alguna vez se burló de nosotros pero con el unico afán de ganarse el cariño del publico. No lo culpo.
Pero muy dentro de la fauna casi post-adolecente del cuarto año de Dibujo Tecnico existía un muchacho de sonrisa amplia q escondía grandes poderes fenomenales. Mx era como un fenomenoide de ideas, la verdad es que nadie lo vio correr por los pasillos, ni pelearse por alguna rensilla estupida ni mucho menos. Muy por el contrario, la leyenda contaba que fué Maximiliano Alonso quien se reveló ante los dioses confabulandose con sus secuases para armar una web anarco-sindical en burla de los profesores. de Mx nadie hablaba mucho, y cuando se fué nadie volvio a recordarlo. Max nunca fué un chico popular ni el nerd fastidioso, qisas ese fué su error, y en los pasillos del Italia no se volvió a pronunciar el monosilabo.
de Max nunca se volvió a hablar, no sería correcto.
Max tiene muchas cosas por hablar.
con estima y un conchito de respeto a don Mx Alaies
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