A mi pequeño sobrino Martín se le murió su mascota y yo me quejo de weas insignificantes dentro de la vida de una persona humana, con el electrocardiograma en la mano, analizo mis pulsaciones por minuto y me doy cuenta de que se dibuja un rostro lleno de precaución, a lo que diré, sentiré, seguiré... el doctor me recomendó Valium con sabor a frutillas, las consecuencias son que me extirpe las anginas marcadas a hierro y fuego, canto en el metro los singles de lipigas y todo se vuelve oscuro en unos segundos, miro de nuevo y mucha gente grita de pánico y yo estoy acostado en el andén de la estación Santa Lucía, pidiendo un segundo de reflexión a mi aflixción, vuelvo a cerrar los ojos y estoy en mi cama y mis amigos están llenando la pieza, se están despidiendo y están alegres porque me saco la piel y les muestro mis huesos y musculatura, mis tendones cantán al unisono en este cruel cuadro subrealista, mis amigos aplauden y lloran de emoción porque estoy dejando mi piel rasmillada y llena de moretones de lado, estoy dejando algo pero no me sale una nueva piel, me ahogo en mi propia sangre y todo vuelve a negro, despierto dentro del útero de dios, muerdo el cordón umbilical y me ahogo en rabia y autodestrucción, ahora volví a nacer muerto en un mundo de muertos donde el sol esta muerto y las flores son pequeños cráneos, pero lo terrorífico es que todos sonríen porque hoy es hallowen, es el día de todos los muertos porque ya todos los santos se han extinguido
...a mi pequeño sobrino martín se le murió su mascota, ahora es un poco mas grande, esta un poco mas muerto.
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1 comentario:
Queda san ares, san musicaparahacerlapieza y sabes?: me imagino a todos los dulces Martines del sur y me da lá pena para empezar la mañana.
Chau
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